GR99 Etapa 7 Manzanedo - Puente Arenas

 GR-99 Etapa 7 - desde Manzanedo a Puente Arenas.

Pasarelas de Los Hocinos

Trayecto Total ........... 24,11 km.

Tiempo Total ............. 8:07 h. 
Tiempo marcha ......... 6:10 h.
Asistentes .................. Endika y Luismi.

Nos hemos levantado a las 9 y Jesús nos tenía preparado un desayuno de aupa, todo artesano, zumo, mermeladas, miel, membrillo, embutido y el bizcocho que hizo ayer Lali, así que hemos salido totalmente restaurados y dispuestos a afrontar la etapa 7 de la GR-99 hasta Puente Arenas. Nos
hemos despedido de Jesús y sus 3 canes y hemos iniciado marcha. El día esta cubierto pero no llueve y la temperatura ideal para caminar.

Regresamos a Cidad de Ebro, para retomar la GR-99 y continuar el camino que nos lleva por la orilla del Ebro, tras pasar Manzanedillo, caminamos hacia la central hidroeléctrica de Bailera y tras dejar en el otro margen el pueblo de Rioseco, seguimos camino de El Hayadal, paso en discordia, que hasta hace unos días había que bordear por la carretera, ya que el dueño de la finca lo había cerrado al paso

de la GR-99. Parece ser que recientemente se ha conseguido volver a utilizar el paso de servidumbre que este paisano había privatizado. Nosotros hemos pasado directamente y al llegar a la granja, una larga instalación de pastor eléctrico separa el camino de la zona agropecuaria.

Poco a poco nos vamos internando en la Garganta de Los Hocinos, el sendero va paralelo al río y por la otra margen discurre la N-232, que va desde Villarcayo hacia el puerto de Las Mazorras. El camino transcurre entre un espeso bosque de quejigos, bojes y otras variedades de ribera que jalonan el camino, llegamos a una zona escalonada por grandes paredes rocosas que  sorteamos a través de las Pasarelas de Los Hocinos, unas pasarelas metálicas adosadas a la roca, que sin ellas no se podría pasar. En esta zona el río esta sembrado de grandes rocas desprendidas de las paredes. Llegamos al puente del Aire, el cauce aquí pasa en silencio y aprovechamos para hacer avituallamiento en las mesas de piedra que hay debajo de una gran chopera.

Cruzamos el puente y cambiamos de margen para ir poco a poco ascendiendo por la calzada romana hasta divisar Puente Arenas, pasamos por el portillo de La Labrada, e iniciamos descenso por la calzada romana, que en algunos tramos todavía conserva con las medianas de separación. Como curiosidad los lugareños han puesto bancos y sillas cerca de los postes de la GR, apropiados para disfrutar de las esplendidas vistas del valle, pero por supuesto descansados.


Al llegar a Puente Arenas, pueblo construido a lo largo del río, nos dirigimos al único puente antiguo que atraviesa el río, cerca de la iglesia de Santa María, otra bonita obra románica. Atravesamos el puente para dirigirnos al lugar de alojamiento en Quintanilla de Valdivielso, Arte y Natura, un antiguo palacete convertido en casa rural. Nosotros nos hemos alojado en el albergue, una habitación enorme con 12 literas para nosotros solo, a escojer. Tiene un centro de interpretación del valle, un jardín con piscina y el comedor esta ubicado en una sala con

grandes ventanales con techos altos y abovedados, con unas 
curiosas bocas encima de los ventanales que comunican con las estancias superiores, hemos preguntado y nos han comentado que se cree que podrían servir para transmitir el calor entre las estancias.


La cena compuesta de una exquisita sopa castellana, huevos con morcilla y de postre entre otros había valenciano, así que no hemos dudado en la elección y hemos acabado como princeses en palacio......jajaja.