Ermita San Pedro de Tejada |
Trayecto Total ........... 15,00 km.
Tiempo Total ............. 4:00 h.
Tiempo marcha ......... 3:20 h.
Asistentes .................. Endika y Luismi.
Tiempo marcha ......... 3:20 h.
Asistentes .................. Endika y Luismi.
El día pintaba bueno, despejado y con buena temperatura, hemos bajado hasta el puente de Puente Arenas, para retomar la ruta por el valle de Valdivieso hacia Trespaderme. El camino nos lleva hacia la ermita de San Pedro de Tejada, una bonita construcción románica del siglo XXII, esta muy bien conservada aunque esta vallada, ya que al parecer aunque se puede visitar, es de propiedad privada, hemos tenido que acceder a través de unos matorrales mas abajo para poder sacar unas fotos.
Después hemos continuado camino hasta llegar al río, donde hemos continuado por su margen izda. hasta llegar a Población de Valdivieso, aquí hemos hecho un alto y hemos aprovechado ala parada para el amaiketako en un área recreativa, cerca del río. A partir de aquí el agua se va tranquilizando, ya que se acerca al embalse de Cereceda, que esta a la altura de Panizares.
Tras continuar por la orilla un buen tramo, hemos llegado a un desvío que sale a la izda. donde la GR se aleja del río unos 2 kms, para retomarlo mas adelante. Hemos atravesado unos bonitos campos repletos de amapolas y hemos sorprendido a un corzo atravesado el camino perdiéndose en la espesura de los arboles, a pasado como alma que lleva el diablo.
Continuamos ruta abandonando el río la ruta hasta Panizares. Una prolongada subida nos lleva hasta el cruce de Arroyo de Valdivieso
por donde continua la GR, desde aquí hemos bajado hasta Panizares ya que será el punto de partida para continuar con esta interesante GR99. Además, alli nos esperaban Miguel y Cruz para poner punto final a estas cuatro emocionantes etapas y a quienes desde aquí, queremos agradecerles su disponibilidad y tiempo. Unos verdaderos scouts.
Al llegar a Panizares se pueden divisar una formación de afilados monolitos llamada Los Cuchillos, que escalan hasta lo alto de la cumbre que hay encima del pueblo. La de hoy a sido una jornada corta pero no menos interesante, aunque a partir de aquí el Ebro deja el cañón y entra en el valle de Tobalina. Después de una emotiva final de etapa nos hemos ido los cuatro a comer a Oña. Después de una agradable sobremesa, hemos dado un paseo por el pueblo donde hemos conocido a Lolo, un personaje entrañable con una peculiar cachaba, que nos ha enseñado todos los rincones y secretos de esta villa milenaria, daba gusto oir con el interes que nos contaba la historia de su querida villa.
Tras despedirnos de Lolo y por supuesto de comprar unas morcillas, hemos iniciado el regreso a casa, y durante el trayecto hemos recordado y compartido con gozo los avatares de estas cuatro etapas con Miguel y Cruz, a los que de nuevo agradecemos que hayan venido a recibirnos y hacer de taxistas....jejeje. También quiero agradecer a Endika por haber compartido estos cuatro días conmigo, y de verdad que ha sido un verdadero placer hacer este camino con él.